Un procesador de alimentos puede ser tu mejor aliado en la cocina. Te mostramos cómo usar este electrodoméstico.
Detrás de un delicioso plato hay mucho esfuerzo y gusto por la cocina, pero ¿es necesario disponer siempre de mucho tiempo para cocinar algo excepcional? La tecnología nos da la posibilidad de simplificar muchos pasos al cocinar.
Para quienes tienen poca experiencia en la cocina, resulta fácil intimidarse por las difíciles preparaciones para lograr un plato con un sabor de impacto.
Entonces, además de pensar que es muy difícil, y hasta a veces imposible cocinar lo que tenemos en mente, terminamos por rendirnos por completo al imaginar que nos tomará demasiado tiempo de nuestro día.
Uno de los electrodomésticos que dispone de una gran variedad de funciones para la cocina es el procesador de alimentos. Pero, ¿para qué sirve? y ¿cómo lo utilizamos? Aquí te contamos un poco más de este eficaz electrodoméstico.
Tabla de Contenidos
¿Para qué sirve un procesador de alimentos?
El complemento perfecto para ahorrar trabajo y esfuerzo en la cocina. Atrás quedarán los cuchillos y las aplanadoras, un procesador de alimentos te ofrecerá la precisión de corte, y textura con la que desees tu alimento.
Para elaborar tus recetas favoritas tal cual lo demanden. Apto para trabajar con cualquier fruta, verdura o demás alimentos, sea que esté crudo o cocinado. Este aparato te brindará una comodidad para trabajar irremplazable.
Ideal para cocinar a gran escala, con menor esfuerzo.
¿Cómo funciona un procesador de alimentos?
Un procesador de alimentos dispone de muchas funcionalidades. Simplemente debes disponer de este y utilizar sus diferentes accesorios para completar las diferentes acciones que necesites al cocinar.
Por ejemplo, para picar y cortar cualquier vegetal en cuestión de segundos, la trituradora dispone de la función “triturar”. A través de la cual gracias a unas afiladas cuchillas metálicas, podrá cortar todo tipo de verduras, carnes, frutos secos, pescado y demás.
¿Quieres laminar el queso, alguna verdura o fruta?, la función de rallar se encargará de esta tarea. Además, de todo esto, una buena procesadora también cuenta con las funcionalidades de batir y hasta exprimir.
Una de las tareas que también puede realizar pero que muy pocos conocen es la de “amasar”. Debido a sus cuchillas mezcladoras, las masas de cualquier tipo quedarán siempre suaves y sin grumos. Ideal para hacer el preparado de pizzas, pasteles y galletas.
Es importante tener en cuenta que un procesador no genera calor, por lo que solo se puede contar con que ejecute las funciones que mencionamos antes: picar, cortar, triturar, batir, exprimir, entre otras. Para terminar el cocinado de los alimentos necesitarás un microondas y un horno, dependiendo de la receta, que lograrán esta tarea en cuestión de minutos.
Nuestra selección de procesadores de alimentos
Para cumplir con todo lo explicado anteriormente, recomendamos al procesador de alimentos Bosch INOX MCM3501M. Posee más de 50 funciones, entre las que destacan el picado, rebanado y rallado. Este procesador de alimentos de todas maneras hará que tus momentos en la cocina sean más agradables.
Otra excelente opción es el procesador de alimentos de Record, que cuenta con diversos accesorios y cuchillas intercambiables para poder hacer sus tareas de manera más eficiente. Además, cuenta con una capacidad de 2 litros. Por último, si lo que deseas es hacer más eficientes tus mañanas, también te recomendamos este extractor de jugos Oster debido a su practicidad y rapidez en preparar las frutas para realizar jugos deliciosos y ricos en vitaminas
Con todos estos tips, ya puedes empezar a cocinar con la ayuda de un procesador de alimentos. ¡Buen provecho!