Cuando nos enfrentamos a momentos de crisis e incertidumbre es normal sentir miedo, ansiedad o estrés. Controlar este tipo de emociones y encontrar equilibrio puede ser todo un reto en estos días, sin embargo, algunas prácticas sencillas pueden generar cambios muy positivos para que tú y los tuyos puedan mejorar su salud mental, incluso si disponen de poco tiempo. ¡Toma nota atentamente!
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Algunos consejos para que tú y tu familia puedan mejorar su salud mental
La salud mental puede definirse como un estado de bienestar que posibilita el desarrollo integral de las personas y que les permite enfrentarse efectivamente a las adversidades. Permite que un individuo establezca relaciones saludables con quienes le rodean y es uno de los derechos humanos fundamentales.
Durante la vida, diferentes factores individuales y sociales pueden socavar nuestra salud mental y llevarnos a estados de angustia o tristeza, pero implementar sencillos hábitos a tu vida cotidiana puede generar cambios muy positivos.
Hacer ejercicio o algún tipo de actividad física
El impacto positivo del ejercicio no se limita solo al mantenimiento y mejora de la condición de tu cuerpo, también puedes recurrir a la actividad física para la ansiedad y los estados de estrés. Encuentra una práctica que sea de tu agrado y aprovecha la ocasión para socializar y conocer nuevas personas.
Actualmente, hay muchos lugares con una variada oferta, que te permitirán escoger actividades de bajo impacto y de mayor exigencia, según tu gusto y tu condición. Sea cual sea el caso, usa los accesorios de gimnasio correctos para que no tengas lesiones y para que tu experiencia sea mejor, y no olvides llevar tu tomatodo para una correcta hidratación.
Dormir y comer bien
La forma en la que duermes afecta directamente tu estado de ánimo. No dormir bien causa mal genio e irritabilidad y a largo plazo puede causar problemas a nivel físico y emocional. Es una función biológica básica de nuestro cuerpo a la que, por lo regular, se le presta poca o ninguna atención. Factores como el tipo de almohada, el nivel de oscuridad y ruido, pueden influir en la calidad de tus momentos de descanso, no ahorres esfuerzos para hacer que tu sueño sea placentero y profundo.
Una buena alimentación también es clave para el equilibrio personal. Comer de una forma saludable hará que te sientas vital y alegre, además es una forma de auto-cuidado básica que habla de una buena autoestima. Evita los alimentos ultra procesados, con altos niveles de azúcar o muy grasosos y, en su lugar, incluye frutas y verduras variadas a tu dieta.
Practica el mindfulness
El mindfulness se basa en concentrar la atención en el presente a través de la meditación, sin preocuparse por lo que ya fue o lo que será. Si bien su origen es la filosofía budista, es una práctica que se ha adaptado de forma natural a las necesidades de la vida cotidiana occidental, a partir del objetivo común de buscar el bienestar y la plenitud espiritual.
En la actualidad, la meditación mindfulness no requiere de posiciones corporales específicas, en lugar de eso se busca centrar la atención en el momento, lo que lleva a una reducción del estrés, influyendo de modo positivo en el estado de ánimo y en el comportamiento.
La práctica de esta forma de meditación puede ayudarte a alejar tu mente, aunque sea por un instante, de las preocupaciones normales de la vida y puede ser una forma de conectarte con la parte más espiritual de tu ser.
Busca consejo en libros de autoayuda
Si te gusta leer, una buena opción para mejorar tu salud mental puede ser leer libros de autoayuda. Encuentra un buen momento del día y disfruta de una lectura que te permita crecer como persona.
Aunque nunca van a reemplazar el consejo de un profesional, actualmente, podrás encontrar una amplia oferta de temas, que te permitirán aprender sobre aquellas cosas que te inquietan o que te interesan. Escoge un buen título y convierte el hábito de la lectura en una práctica cotidiana al iniciar o terminar tu día.
Agradecer activamente
Esto significa ser consciente de las cosas buenas de la vida y agradecer por ellas. En algunas ocasiones, el diario vivir nos impide reconocer cosas simples que hacen que nuestra vida sea mejor, como el afecto de familiares y amigos, o simples detalles, como una buena comida.
Agradecer implica el reconocimiento de que algo es positivo y lo destaca incluso en una circunstancia adversa. La gratitud trae beneficios a las personas porque genera una sensación de tranquilidad, y convertirla en un hábito enfoca en el bienestar propio y de las personas cercanas.
Una linda forma de tener presente todo aquello por lo cual podrías agradecer es llevar un diario de gratitud, que puede ser una forma de materializar y llevar a la práctica la actitud y expresión positiva de dar las gracias.
En el mercado puedes encontrar agendas y bitácoras para todos los gustos, y bastará con que al inicio y al final de cada jornada.
En las mañanas, preferiblemente al levantarte, escribe tres cosas por las cuales te sientes agradecido, dos cosas que quisieras que pasaran en ese día y una afirmación positiva sobre ti. En las noches, al terminar tus ocupaciones, escribe tres cosas que hicieron de ese un buen día y dos que hubiesen hecho que fuese un día mejor. Aunque seguramente hay cosas malas y buenas en el diario vivir, se trata de hacer protagonista aquello que es positivo.
Además de que podrás expresarte libremente, no dudes en acudir a tu diario cuando lo necesites, para recordar esas pequeñas y grandes cosas que hacen que tu vida sea buena.
Si no solo te preocupas por ti, sino también por aquellos a quienes quieres y te preguntabas si puedes contribuir a mejorar su salud mental, ahora sabes que cambios y prácticas simples en la vida cotidiana pueden tener un impacto muy positivo. Crecer como individuo no tiene por qué ocupar largas jornadas y puede ser totalmente compatible con una forma de vida activa y saludable. Te invitamos a visitar nuestra web para que consigas todos los libros o agendas que te hemos mencionado durante el artículo.